Conoce las ventajas y desventajas del leasing o arrendamiento puro, la modalidad de adquisición tanto para vehículos nuevos como seminuevos que ofrece el mercado automotriz.
El leasing o arrendamiento puro es un sistema en el que mediante un contrato se detalla que el arrendatario tendrá que pagar una cuota mensual por determinado tiempo, la cual se establece de acuerdo a las características del auto como modelo, equipamiento, entre otras.
Aunque la mayoría de quienes adquieren un auto de esta forma son empresas que requieren de una flotilla y por lo regular se trata de autos nuevos, un particular también puede comprar un auto por medio de leasing.
Una vez saldado el contrato, el arrendatario tiene la posibilidad de renovar el contrato para otro auto, adquirir el vehículo pagando la diferencia entre el monto pagado y el costo actual del precio vigente o extender sus rentas para seguir utilizando el mismo vehículo.
Ventajas del leasing
Entre las ventajas de esta modalidad, la financiera Bepensa destaca que genera mensualidades más baratas y un enganche mínimo o inexistente.
Esta alternativa también es ideal para quienes les gusta estrenar modelos recientes constantemente, ya que los contratos duran de dos a cuatro años y podrías renovarlos por un coche nuevo.
Por su parte, la arrendadora automotriz Nexu señala que el leasing es 100 por ciento deducible de impuestos para las pymes y las grandes empresas. En el caso de las personas físicas, es posible deducir impuestos pero en un menor porcentaje.
Otra de las ventajas es que quien compra no tiene que absorber la depreciación de un auto nuevo en cuanto sale de la agencia, que normalmente es de entre 25 y hasta 30% de su valor, dependiendo del modelo; sin embargo, esta ventaja también aplica para la compra de un auto seminuevo.