Ciudad de México 14 octubre.- El Instituto Nacional de Ciencia y Tecnología Industrial Avanzada (AIST), Toyota Motor Corporation y Toyota Central R&D Labs investigan la implementación de tecnologías avanzadas en el campo de la energía y el medio ambiente.
Toyota investiga la neutralidad de carbono. La neutralidad de carbono significa lograr emisiones netas de CO2 durante todo el ciclo de vida de un producto en una sociedad basada en el reciclaje, desde su producción, transporte y uso.
Las preguntas para lograr la neutralidad de carbono incluyen: ¿qué tipo de energía se está utilizando, quién la utiliza, dónde se utiliza, cuánto se utiliza y de qué manera se utiliza?
Dado que las condiciones de energía difieren según el país y la región, se deduce que neto cero CO2 emisiones pueden lograrse de diferentes maneras. En lugar de limitar las opciones, las tres partes investigarán formas de ampliar las opciones en las formas de energía y tecnologías disponibles.
Los autos del futuro
AIST, Toyota y Toyota CRDL discutirán la investigación conjunta sobre los siguientes cuatro temas:
- Establecer escenarios energéticos
Usando modelos de energía desarrollados por AIST, las tres partes analizarán el impacto en los sistemas de uso de energía, políticas ambientales de energía y otros cambios sociales.
Considerarán la implementación de nuevas tecnologías, el impacto en el medio ambiente y los costos, desarrollarán escenarios energéticos para lograr la neutralidad de carbono.
- Establecer redes urbanas de energía
Las tres partes propondrán una estructura energética urbana óptima neutral en carbono y que minimice los costos que utilice energías renovables. También propondrán una infraestructura energética de alta calidad. Pero asequible que haga uso de tecnologías de electrificación desarrolladas para automóviles.
Toyota investiga tecnologías para producir hidrógeno, para transportar hidrógeno de forma segura y a bajo costo y para utilizar el hidrógeno como energía.
En el futuro, las tres organizaciones ven la posibilidad de varias tecnologías capaces de contribuir a la consecución de la neutralidad de carbono para 2050.