Después de casi tres años de los sismos de 2017 en donde cientos de edificios se vieron afectados en diferentes estados de la República, la Ciudad de México, Morelos, Guerrero, Puebla, Oaxaca y Chiapas, hay algunos edificios históricos y ruinas que resultaron dañadas por lo que hasta el día de hoy no se les ha proporcionado un seguro que los proteja por daños causados por movimientos telúricos.
Es por esta razón que la Secretaría de Cultura federal ha estado trabajando en una alternativa, junto con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público para poder combatir el problema.
Y se está buscando que los más de 20 mil inmuebles federales dañados de los cuales son en su mayoría monumentos históricos, artísticos o arqueológicos, tengan consigo algún tipo de cobertura. Cuyo seguro será para movimientos telúricos para sitios arqueológicos como para históricos y será por parte del INAH.
Pero aún se siguen valorando algunos casos como es el de los templos ya que estos a veces cuentan con otro tipo de seguro que corre a cargo de otra administración “en el caso de los templos –que son propiedad federal y están bajo el resguardo de alguna asociación religiosa–, condicionar ese uso… con la condición de que contrate, individualmente, templo por templo, un seguro, lo cual resultaría más barato que contratar un paquete para todo el país y (éste) sería a cargo de la asociación religiosa”, apuntó.
En el caso de la Casa de la Malinche o Casa Colorada –que fue habitada por los muralistas Rina Lazo (1923-2019) y Arturo García Bustos (1926-2017)–, también se condiciona el apoyo del Programa Nacional de Reconstrucción (PNR).