Cualquier objeto que se considere obra de arte puede asegurarse, ya sean cuadros, pinturas, mobiliario antiguo, esculturas, tapices o incluso grabados.
Para establecer el valor de una obra de arte, es importante realizar una valoración profesional para conocer cuál es su valor real. En algunos casos el valor de algunas piezas se modifican de acuerdo a ciertos acontecimientos, por ejemplo, si el pintor es reconocido y acaba de fallecer, es muy probable que sus obras adquieran un valor mucho más elevado que el que tenía.
La obra será tasada por la compañía aseguradora antes de que la póliza pueda ser contratada, por lo que el precio de mercado, la antigüedad, autoría o técnica determinarán su valor. Expertos de la compañía tasarán la obra y establecerán la prima a pagar y la indemnización en caso de siniestro.
Tipos de seguros para obras de arte
Seguro clavo a clavo: Así se le denomina a la póliza que se contrata para trasladar obras de arte que se exponen de manera temporal en museos y galerías. De esta manera, la pieza estará protegida desde que se prepara para transportarla, el embalaje y desembalaje, su estancia en la exposición a la que ha sido llevada, y una vez desmontada ésta hasta que regresa a su ubicación original.
Seguro a todo riesgo: Normalmente de carácter anual, su objetivo es el de otorgar a las obras protección ante posibles siniestros que puedan provocar terceros, según el valor o capital que se estableció al contratar la póliza. Además, el seguro de riesgos por daños materiales cubrirá aquellos daños que se hayan incluido en el contrato entre la compañía y la entidad contratante.
Coberturas de los seguros para piezas artísticas
- Transporte
- Depreciación artística
- Robo y opción de recompra
- Daños materiales
- Responsabilidad civil de restauradores de arte
- Terrorismo
Exclusiones
- Desgaste natural o envejecimiento
- Deterioro gradual
- Oxidación
- Contaminación